domingo, 16 de agosto de 2015

La etnia “Gayón”, antiguos pobladores de la region de El Tocuyo

      Antes de la llegada de los exterminadores europeos, el territorio “Gayón” comprendía desde las estribaciones de la serranía  Matatere, ubicada al norte de lo que hoy día se conoce como Estado Lara, en la ancha y larga región llamada antiguamente  por nuestros Ancestros: “Aribicoa”,  el cual incluye a Bobare, Carorita, Duaca  y Aroa, para unirse con la zona del Turbio ó Barquisimeto, también con los valles de Quibor, las riberas del río  Tocuyo y por su puesto a través de su curso  hasta llegar a las montañas que antiguamente se llamaron Dinta y Dinira, es decir,  hasta  Sanare, Los Humocaros, Barbacoas, Guaríco, Guaitó, Chabasquén y buena parte de la zona  alta del hoy llamado Estado Portuguesa.

El pueblo “Gayón”, cuyo término significa “Hermano”,  era una  étnea agrícola y sedentaria, pero al igual que todas las comunidades Aborígenes de nuestro continente “Ábya Yala” , fue sometida a la exterminación más horrenda propinada por los europeos, contando con la gran desventaja de que los piratas españoles después de haber fundado  (tomando en cuenta  que  estos inhumanos les llamaban a las invasiones  fundaciones)
   Santa Cruz en 1.502 (ubicada en la Península de la Goajira) por  el Sanguinario español de Alonso de Ojeda, luego Coro en 1.527, por  el Despiadado alemán Ambrosio Alfinger, Maracaibo  en 1.529 también por  este mismo sujeto (Alfinger), decidieron establecer su acción genocida desde las riberas del río Tocuyo en 1.545, cuando el  Terrorista  Juan Pérez  de Tolosa, emprendió su matanza Aborigen desde el propio territorio “Gayón” atentando contra la humanidad  y la culturalidad de nuestras Abuelas y Abuelos.    

A partir de ese momento la soberanía  de nuestra sagrada y extensa  nación “Gayón”,  se vio coartada debido a las agresiones  de las potencias europea , que con mayor experiencias de guerras  y por ende,  con armas mayormente sofisticadas que las nuestras  quisieron arrodillarnos  a las órdenes de las coronas infernales de los reyes de España, pero que no se les hizo fácil porque los nuestros  comenzaron a resistir con gallardía, de allí que los miembros de este milenario pueblo pasaron de: dueños y gobernantes de sus propios territorios y destinos
Esclavos  y perseguidos nómadas, reolectores de frutas y cazadores, resguardándose en los lugares de difícil acceso (las montañas)  para preservar la integridad física  y sus modos de vidas ancestrales, tomando en cuenta que hoy sus hijos y nietos estamos esparcidos por todos estos lugares, solo que ahora nos llaman “Campesinos”,  que por cierto en la actualidad reclamamos las tierras que nos arrebataron los asesinos y que aún  se encuentran en manos de sus descendientes hoy llamados  “Terratenientes”.  
      Para pescar  el boca chico, la palambra, las lizas,  sardinas, puyón y saltador, utilizaban anzuelos hechos con huesos, arpones y tarrayas. Esta Cultura también desarrollo el sistema de pesca por emborrachamiento, que consistía en utilizar el extracto de la raíz de una planta llamada “Barbaco” que atontaba a los peces y de esta manera solían sacarlos con mayor facilidad.
La familia “Gayón” se vestía con una pequeña falda tejida de fibra vegetal que solo cubría los órganos reproductivos, para evitar  exponerlos al clima o para protegerlos de cualquier accidente ocurrido dentro de las jornadas laborales, jamás lo cubrían por vergüenza o pudor ya que la sexualidad  era concebida como una condición natural de cada  ser  humano muy lejos de los impulsos  morbosos que genéticamente por desgracia nos transmitieron los europeos con las violaciones hechas a nuestras Abuelas Ancestras. El resto de sus cuerpos esbeltos y fornidos estaban decorados con hermosos motivos pintados con una tinta llamada Bariquí.

En esta Cultura existía la figura del Moján, quien era el hombre más antiguo de la comunidad  y cumplía con las funciones de un abuelo sabio y curandero ya que había heredado el legado étno-medicinal y las propiedades curativas de ciertos animales como la Onza, también se desempeñaba como guía espiritual y por ende dirigía los rituales sagrados.
Entre otras de sus atribuciones estaba la de orientar las decisiones relevantes de la comunidad en lo político y en lo social.  El Moján también era un gran maestro porque dedicaba buena parte de su tiempo a la enseñanza o transmisión de saberes  para  todos los niños y niñas de su comunidad

Los Gayones, fabricaban cerámicas, cultivaron el máiz como alimento básico y prioritario, también cultivaron las caraotas, las lentejas, el quinchoncho, el cactus llamado cadushi, del cual preparaban una harina para hacer sopa como alimento de alta estima y la penca de cocuy horneada como rica fuente de proteínas, el guaje, la auyama, la yuca, la nuez, la palma, el cambur, la flor del Bucare, la cual servía como una deliciosa y nutritiva carne vegetal, e/o.
Dormían en chinchorros dentro de grandes casas comunales  sin paredes y diseñadas para varias familias con techos de pajas y hojas de pencas de cocuizas. eran consumidores de miel y recolectaban alimentos para todo el invierno.
Sus armas para la caza y la defensa territorial estaba comprendida por Arcos de 1,50 metros de largo, flechas de un metro de  longitud hechas de verada ó caña con una pieza puntiaguda fijada en un extremo y en el otro plumas de aves amarradas con hilos encerados para la estabilidad y la precisión del lanzamiento, también utilizaban las cerbatanas con dardos hechos de hebras de palmas tostadas con puntas afiladas.

Otra forma de conocer al pueblo Gayón la podemos encontrar a través de su idioma, ya que aunque gran parte del mismo desapareció de la memoria colectiva debido al hostigamiento europeo y a la evangelización forzada, podemos contar con un corto listado de palabras que dan fe de una Cultura con idioma milenario:

3 comentarios:

  1. Interesante sería una lista de esas palabras gayonas.

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  2. ¿que sabe sobre la resistencia que aun tienen los gayón en la población del páramo las rosas al norte de barquisimeto?

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